El estilo de vida mediterráneo, pionero de la vida basada en plantas, ha tenido un impacto significativo en todo el mundo, tanto en el sabor como en la salud. Una amplia gama de beneficios para la salud se han acreditado a este estilo de alimentación, que incluye un menor riesgo de enfermedad cardíaca y diabetes tipo 2, un peso saludable e incluso protección del cerebro.